Ligeras, elegantes y simplemente cómodas, las bailarinas son el calzado perfecto para la mujer moderna en verano. Aunque en un principio se diseñaron como zapatos profesionales, para bailarines y artistas de ballet, ahora este calzado ligero también ha podido establecerse en la vida cotidiana. Hoy en día, la bailarina es un auténtico culto, existe en innumerables colores, formas, looks y materiales y puede combinarse como un perfecto todoterreno con casi cualquier conjunto casual. Por cierto, la bailarina se hizo famosa gracias a Audrey Hepburn. El icono de estilo llevaba bailarinas tanto en ocasiones festivas como simplemente en la vida cotidiana y fue así capaz de desencadenar una tendencia mundial que no ha perdido nada de su atractivo en el siglo XXI.

Las innumerables variaciones de los zapatos hacen de las bailarinas un verdadero accesorio de culto para cualquier look. Con un lazo en el lateral, una punta puntiaguda o diferentes combinaciones de materiales, cada bailarina se ve un poco diferente de la siguiente. Esta diversidad es especialmente popular entre las mujeres, porque no quieres llevar las mismas bailarinas que tu mejor amiga tiene en los pies. Gracias a sus innumerables atributos, ningún zapato se parece a otro modelo, pero los zapatos son siempre muy cómodos y realmente ligeros. Gracias a su forma plana y a su suela, sujetan muy bien el pie y pueden llevarse también en recorridos más largos. Además, si necesitas cambiar de zapatos por la noche o en la oficina, pueden guardarse fácilmente en cualquier bolso. La construcción ligera lo hace posible.